El verano pasado, Los Felices —nuestro hotel dedicado al universo de la moda y el imaginario de Palm Springs— se convirtió en el escenario perfecto para una colaboración que tenía que pasar. Aitor fue el protagonista de uno de nuestros pop-ups más especiales en nuestra habitación acristalada en medio del lobby, donde presentó piezas exclusivas y compartió su visión con una comunidad ávida de nuevas narrativas estéticas. Durante unos días, su universo tomó forma dentro del nuestro, en un diálogo sincero entre texturas, colores y sensibilidad.
Como homenaje a esa conexión creativa, una de nuestras habitaciones lleva su nombre. Su habitación dentro del hotel es un pequeño santuario dentro de Los Felices, un hotel donde cada rincón respira moda, color y espíritu editorial.
Goikoetxea forma parte de una nueva generación de creadores que entienden la moda como un espejo político, emocional y social. Su trabajo, presentado en pasarelas independientes, exposiciones y proyectos híbridos, celebra lo no normativo, lo fluido, lo visceral. Le interesa más lo que una prenda dice que lo que aparenta. Su ropa no adorna: revela.
Que su nombre forme parte del ecosistema de Los Felices, no es casualidad. Compartimos con él la pasión por lo auténtico, por lo estético como vía de transformación y por las historias que desafían los moldes. Por eso esta alianza no es una colaboración puntual, sino una complicidad que seguiremos cultivando temporada tras temporada.
Aitor Goikoetxea no es solo un diseñador, es sensibilidad en estado puro. Y en Ibiza, esa sensibilidad encuentra el mejor de los escenarios.